Manuel Álvarez Ugarte se expresa indagando en la sonoridad de las músicas de raíz de Latinoamérica.
Centrado en su obra instrumental, no le es ajeno sin embargo el territorio de la canción, con el que interactúa permanentemente en su faceta de productor, arreglador y sesionista, destacándose como intérprete de otros instrumentos: charango, ronroco, bandoneón.